miércoles, 27 de abril de 2011
lunes, 4 de abril de 2011
Un día de atletismo
Si pinchas en la página de arriba llamada Photopeach, verás algunas fotos de la pasada jornada de atletismo que pasamos en el polideportivo
Otra sencilla experiencia
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1.) Objetivo 2.) Material necesario 3.) Qué debes hacer y en qué debes fijarte 4.) Qué sucede 5.) Consejos para padres y profesores | |||||
Objetivo Poner en equilibrio un tenedor en un vaso ubicando su centro de gravedad. | |||||
Material necesario
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Qué debes hacer y en qué debes fijarte 1. Haz una bola de arcilla del tamaño de una canica grande. 2. Introduce la punta de uno de los tenedores en la bola de arcilla. CONSEJO: cuanto más aprietes la arcilla, mejor saldrá el experimento. 3. Introduce el otro tenedor formando un ángulo de unos 45 grados respecto al primero. 4. Clava el palillo por debajo de la bola de arcilla situada entre los tenedores. 5. Coloca el otro extremo del palillo en la base del vaso. 6. Desplázalo por la base del vaso hasta conseguir el equilibrio de los tenedores. Si los tenedores no se equilibran, disminuye el ángulo entre ellos. 7. Haz los ajustes necesarios hasta conseguir el equilibrio de los tenedores. | |||||
Qué sucede El ángulo de los tenedores reparte el peso de los mismos, de modo que hay un punto del palillo en el que se concentra todo el peso. Este punto se denomina centro de gravedad. Si suspendes un objeto de cualquier punto, lo sueltas y dejas que pare de moverse, el centro de gravedad se encontrará en una línea vertical que pasa a través del punto de suspensión. A menos que se consiga equilibrar el objeto por encima del punto de suspensión, generalmente el centro de gravedad se encuentra por debajo de dicho punto. |
sábado, 2 de abril de 2011
¿Quién dice que los números son aburridos?
¿Que te parece comprobar en la página del INE en qué parte del país hay más gente que se apellida como tú? Claro, si te apellidas Martínez o Sánchez, va a estar todo el mapa cuajado, pero con otros apellidos se ve claramente el origen del mismo. Con los más raros, puede ser hasta que descubras posibles parientes.
Otra utilidad: quizás no te gustaría ponerle, algún día, a tu hijo el típico nombre que tiene mucha gente y para eso puedes recurrir a este apartado (desglosado por sexos e incluso por provincias).
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